Decepcionante se queda corto ya que no ha cumplido ninguna de nuestras expectativas. En primer lugar, la ubicación, que además de estar en un pueblo perdido de la mano de Dios (cosa que nosotros ya sabiamos) escogimos este lugar porque nos enamoró el apartamento tempranillo por el fabuloso jacuzzi que ofrecia. Este motivo, el jacuzzi, nos hizo pensar que nos compensaba el estar más lejos de los sitios que queriamos visitar con tal de disfrutarlo, por eso, tamaña sorpresa fué comprobar que no funcionaba. Este pequeño inconveniente no nos pareció a lo primero gran cosa, nos íbamos a alojar 5 noches y perder una tampoco suponía nada, salvo que fueron pasando y pasando los días y ni lo teníamos arreglado ni tampoco se ponían en contacto con nosotros para darnos explicaciones. Respecto a las instalaciones, y omitiendo el problema anterior, es más pequeño de lo que luce en las fotos,pero especial relevancia el secador, que brillaba por su ausencia a pesar de salir ofertado. Por último, Nabil, el señor que nos atendió en toda nuestra estancia al menos tuvo el detalle el último día de hacernos una rebaja en el precio, ya que se entiende que por el precio que está la noche y sin jacuzzi es una estafa. Desde luego nuestra experiencia no es buena, y solo nos cabe destacar la compensación final.